Danza oriental en la casa del Duque.

Cuando llegamos aterrorizados, y no por los caminos de árboles de dedos huésudos y el negro azabache del camino, sino por mi manera de conducir, a la Casa Real del Soto de Roma, el espanto fue atenuándose al contemplar aquella maravillosa casa donde nos disponíamos a bailar.

Aunque estábamos más atentas de la actuación que de aquel maravilloso lugar, no podíamos evitar quedarnos sorprendidas por la belleza en los jardines y aposentos, ahora convertidos en salas para que llenen los comensales.

Después de la actuación, pude centrar la atención en el lugar. Bailamos al norte de la monumental ciudad de Granada y a medio camino de la ruta de Washington Irving, a pocos kilómetros del lugar donde nació Federico García Lorca y a los pies de la sierra de Parapanda donde se encuentra El Soto De Roma, una magnífica casa del s.XIX que perteneció al Duque de Wellington. Para más información del lugar pincha aquí.

ALGUNAS FOTILLOS DE LA ACTUACIÓN Y BACKSTAGE: